El ganchillo o crochet es el mejor compañero del bebé, sin lugar a dudas. No porque lo diga yo, que también, sino porque lo dicen ellos, sin decir palabra. Sus sonrisas, gorjeos, carcajadas y manotadas son la muestra evidente de que no hay amigurumi, mordedor o sonajero, hecho con nuestras manos, al que puedan resistirse.
Hoy en día las lanas con las que elaboramos nuestras labores están preparadas para ser mordidas, manoseadas, lanzadas y mil -adas más que a nuestros pequeñajos se les puedan ocurrir. Los fabricantes han encontrado la forma de ofrecernos material especial para las artesanas que amamos estas labores.
Y aunque mi bebé ya tiene 16 añazos, no dejo de crear cucaditas tan monas como éstas.
Gracias a las imágenes de Pinterest, y a los artesanos que comparten su experiencia con todos nosotros.
Manualidades para todos. #unidassomosmás
Espero tu comentarios, saludos!!