Ya sabéis que me gusta a mí un complemento, más de lo que yo quisiera; que son mi perdición, lo sé y lo lamento, sobre todo porque no puedo tener tantos caprichitos como me gustaría.
Pañuelos, bolsos grandes o pequeños (para crispy), collares, gargantillas, zapatillas, esparto, todo lo manejo como si hubiese nacido con el don de dar vueltas a la cabeza, hasta encontrar una solución para vestir a mi gusto, que ya sabéis que es: COMO ME DA LA GANA!!!
Los gorros en invierno, viviendo en Valencia, se me han quedado en el armario; que hizo un calor de la leche, no hubo invierno, con lo cual tejer no se cuantos gorros, paqué????
Pero este verano he encontrado la horma de mi zapato. Los sombreros... los puñeteros sombrero, que me pirran y me quedan como el culo. De verdad, verdadera!!! Lloraría si no fuera una pérdida de tiempo. Me gustan??? NO, ME ENCANTAN.
Por qué, Mamá, por qué no me dotaste con una carita para llevar sombrero???? Con lo que yo disfrutaría, en la playita, por la tarde, en un paseo, por la mañana, para ir al super, en el huerto, en casa de mi suegra, en un viaje a cualquier parte,.......
Para más jodienda, he conocido a una mala persona que me castiga, con una preciosidades, maravillas, hermosuras; creo que voy a bloquearla, porque es insoportable tanta belleza. Es más, sabe que la odio profundamente, y le da igual!!!!